lunes, 13 de abril de 2009

EL TRABAJO ENAJENADO
KARL MARX


De manera inicial comprendamos que se parte de los presupuestos económicos como primicia fundamental, entender primero como en el ser humano se evidencian leyes del trabajo que se caracterizan por la separación del trabajo, capital, tierra, salario, renta de la tierra. En medio de esta economía política el trabajador queda rebajado en mercancía. Una vez explicado lo anterior como aspecto introductorio es importante evidenciar como el capital se concentra en unos pocos, quedando así el trabajador reducido a un ser que se convierte en objeto productivo.
Por medio de lo anterior en efecto se puede corroborar que la sociedad queda divida ante dos clases: los propietarios y obreros desposeídos. La economía parte del hecho de la propiedad privada, imponiendo corporaciones, instituciones, multinacionales, impuestas lógicamente por el monopolio.
Sin embargo se puede observar como estos entes trabajadores, se vuelven más pobres en el ejercicio de cuanto produce, cuanto más crece su producción en potencia y en volumen generando riqueza a otros que lógicamente son minoría, así pues se establece como el trabajador se convierte en siervo de su objeto, un ejemplo claro de ello y que nos permite contextualizarnos tiene que ver en la manera que el trabajador realiza su función de trabajo asignado y por otro lado recibe remuneración que apuntan a la subsistencia. Esta producción dentro del trabajo, es esa relación existente entre el trabajador y su actividad.
El trabajador se inscribe en una lógica de capitalismo, sin embargo este trabajo no pertenece a su ser, puesto que no desarrolla una libre energía física y espiritual, sino que mortifica su cuerpo y arruina su espíritu, su trabajo no es un trabajo sino un trabajo forzado, por ello no es la satisfacción de una necesidad, sino solamente un medio para satisfacer las necesidades (primarias) fuera del trabajo que más adelante se hará alusión a ello. Es claro decir que este trabajador posee necesidades primarias que debe suplir, tales como beber, engendrar comer, son actividades meramente también animales. Sin embargo estas lógicas de producción hacen que el trabajador se sienta un ser ajeno a este sistema, sintiendo así como la relación del trabajador con la actividad, es evidentemente extraña, que no le pertenece, la acción como pasión, la fuerza como impotencia, la propia energía física y espiritual del mismo, su vida personal.
Se supone que en lo anterior se trata de establecer el aspecto económico pero se deja de lado el aspecto obrero. Es así como el trabajador siente que su actividad es goce de otros en este caso se habla específicamente de los capitalistas que concentran dinero por medio de la explotación permanente de los trabajadores.
Creando en los mismos un sentimiento de que el trabajo le es extraño para ellos. Por otro lado es importante evidenciar como en la tesis se apuesta por una división de clases, lo importante es entender como esta división genera una incitación a la revolución de acuerdo a los planteamientos de Marx, puesto que el trabajador es insatisfecho ante el trabajo. Enunciándose una dualidad entre las maravillas para los ricos y privaciones para el trabajador.



Es evidente que este tipo de relación entre el hombre y la producción a grande escala genera mayor riqueza que se concentra en unos pocos, puesto que brinda hegemonía al sector capitalista. Convirtiéndolo en un sujeto explotado y sometido a las lógicas productivas, es claro también como esta producción empobrece los sectores de clase baja y media y aumenta en bienes de valor a los inversionistas. Dejando un poco de lado ello es importante enunciar como la libre comercialización y con la llegada progresiva de sectores privados y corporaciones el sujeto se inscribe en el capitalismo y por ende en un consumismo desenfrenado, sin embargo tenido en cuenta la tesis y la antítesis es necesario condensar como esta política económica y como este trabador inconforme y no apropiado de las lógicas mercantilizadas, se obtiene como resultado un hombre enajenado al trabajo, el cual sede su mano de obra a las ordenes capitalistas como fin último de enriquecerse. Entendamos entonces esta enajenación del trabajador como el trabajador se vuelve objeto, en una existencia exterior, sino que existe fuera de él, independiente, extraño situado en unas leyes económicas de la siguiente forma: cuanto más produce el trabajador, tanto menos ha de consumir, cuanto más valores crea, tanto más indigno es el, cuanto más elaborado es el producto, tanto más deforme es el trabajador.
Finalmente el trabajo externo, en la cual el hombre se enajena, es un trabajo de auto sacrificio, lo anterior es referente a la relación entre el trabajo y el obrero pasando un poco a la relación del trabajo enajenado con la propiedad privada se sigue, además de la emancipación de la sociedad de la propiedad privada, entendamos como emancipación la libertad que tiene en la sociedad las propiedades privadas prevaleciendo con gran hegemonía.

JHONATAN MUÑOZ A

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